El Parador de Cuenca es un antiguo convento ubicado en un envidiable emplazamiento en la Hoz del Huécar, un compendio de escarpadas paredes y frondosa vegetación a las afueras de la ciudad, mirando hacia las mágicas casas colgadas.
El Parador de Cuenca es un antiguo convento ubicado en un envidiable emplazamiento en la Hoz del Huécar, un compendio de escarpadas paredes y frondosa vegetación a las afueras de la ciudad, mirando hacia las mágicas casas colgadas.