Miriam vive en Cartagena y trabaja en un supermercado. Según relata La Razón, ayer cuando estaba en casa con su familia alguien pasó una nota bajo la puerta: “Somos tus vecinos y queremos pedirte por el bien de todos que te busques otra vivienda mientras dure esto. Hemos visto que trabajas en un supermercado y aquí vivimos muchas personas. No queremos más riesgos. Gracias”.
Fue su hijo de 10 años quien encontró la nota y se puso a llorar desconsoladamente. Al ver la angustia del pequeño, Miriam decidió contestar a “los valientes” que dejaron la nota. “Me parece cobarde dejarla debajo de la puerta, que la coja mi hijo, la lea y se ponga a llorar pensando que nos van a echar de casa porque su madre trabaja en un supermercado” relata.
El indignante mensaje de unos vecinos que piden a un médico que se vaya del edificio